Y yo que creía estar vieja..nomás lo aparento.

Mis ojos eran diminutos y cristalinos, y esque ahora que soy una mujercita-estudiante-responsable y hago mi servicio social, ya no tengo tiempo para descansar de las noches ociosas y de juerga juvenil.

Mi primer fin de semana siendo la señorita relaciones públicas pasó bien, mucho mejor de lo esperado. Mis compañeros de módulo de información son 2: uno que es rebelde y no cree que alguien que escuche Led Zeppelin pueda escuchar cumbias y muucccho menos los senos de hombre, y una mujercita (pequeña y berrinchuda, pero buena gente) que esta enamorada de él. Dicen que soy muy amable con la gente por que es mi primer fin de semana...puede ser.

El sábado en la noche, aún tenía pila..pero...
corte a !gran fiesta de Raúl!
corte a: despedida de amigo que se va vivir a Canadá. Brindemos, lloremos y volvamos a brindar.
Y de regreso a casa de Raúl para ver el amanecer.
Conclusión: 6 de la mañana en mi casa con la señorita la diversión está sobre ruedas (Pam) y un desconocido.

Ya era domingo. Y no falte, a las 4 en punto estaba ya sentada en la cineteca esperando ver pasar a bloggeros, amigos, conocidos y enemigos. 1 café expresso y un americano lograron mantenerme hasta los 9 orgasmos (no míos, la película)para poder llegar arrastrandome a mi casa y dormir 16 horotas.

Hoy ya estoy reanimada, aunque creo tener ojeras ya de por vida.